Hoy te explicamos a qué se refiere este concepto que nos involucra a todos, en la era de la interconexión. ¡No te pierdas la siguiente nota!
El Internet de las cosas es un concepto que deriva de la sigla en inglés IoT: Internet of things. Vivimos en la era de la interconexión y debido a ello surgió esta tendencia. ¿La razón? El Internet es cada vez más accesible, lo que se traduce en la disminución de su costo de conexión. Pero ¿qué significa realmente el internet de las cosas? En palabras simples hace referencia a los dispositivos que almacenan y transmiten información a través de Internet.
¡Un mundo de posibilidades!
El IoT o Internet de las cosas abre un mundo de posibilidades para los negocios y por supuesto para toda la sociedad. En nuestro diario vivir coexistimos con objetos conectados que forman parte del Internet de las cosas. Para que lo sepas, según el Worldwide Global DataSphere IoT Devices and Data Forecast para el año 2025 tendremos más de 41.600 millones de dispositivos conectados. ¿Lo puedes creer?
¿Quieres algunos ejemplos del impacto del Internet de las cosas?
Vehículos que conducen solos: ya existen los automóviles inteligentes, con pantalla táctil y muchos sensores que facilitan la vida al usuario y que incluso se manejan solos.
Robots aspiradora: tienen muchos sensores que permiten limpiar el suelo de la casa sin chocarse con nada y esquivando obstáculos.
Smart home: hay diversos dispositivos «smart» para hogares que tienen sensores de presencia que encienden luces automáticamente y otros de temperatura o humedad que activan otros aparatos.
Son tantos los dispositivos IoT que se conectan a través de un proceso llamado M2M (machine to machine, o máquina a máquina) en el que dos dispositivos se comunican entre sí utilizando cualquier tipo de conectividad como cable, WiFi, o Bluetooth, haciendo su trabajo sin que los humanos deban intervenir. Además, debes entender que estos dispositivos conectados generan datos que llegan a una plataforma IoT que recolecta, procesa y analiza la información. En este contexto y gracias a ese proceso, se pueden concluir hábitos y preferencias facilitando la vida de las personas.